Quien sufre migrañas tiene algo más que un fuerte dolor de cabeza. Porque durante un ataque de migraña se producen dolores punzantes que a veces son casi insoportables. Acompañados de náuseas, vómitos o incluso sensibilidad a la luz.
-> En la actualidad, varios estudios han demostrado que el uso de la fisioterapia en combinación con el tratamiento farmacológico puede lograr buenos resultados. La duración, la frecuencia y la intensidad de los ataques podrían minimizarse significativamente en muchos pacientes.
-> Sin embargo, no existe una terapia especial para todos los pacientes migrañosos. Ésta debe adaptarse siempre individualmente a cada paciente y a su situación. Porque hay distintos tipos de migraña, que deben tratarse de forma diferente.
-> Sin embargo, se ha demostrado que los métodos especiales de relajación, como la relajación muscular progresiva según Jakobsen o la terapia manual, han funcionado muy bien con los pacientes.