Dolores de cabeza, esmalte desgastado y, por tanto, dientes dañados de forma permanente: esto es lo que realmente puede ocurrir si se muerden las mandíbulas juntas durante un largo periodo de tiempo.
Además de una férula dental para evitar el rechinamiento por la noche, también es importante relajar los músculos de la mandíbula y, por tanto, relajar todas las estructuras.
Existen ejercicios para ello. Echa un vistazo aquí:
-> Coloque el borde de los dedos índice y pulgar en ángulo recto con la mandíbula inferior, enganchando la barbilla, por así decirlo. Tire de la mandíbula inferior hacia abajo tanto como sea posible y mantenga el estiramiento durante 20 segundos. 5 repeticiones.
-> Coloque las yemas de los dedos (sin las del pulgar) bajo el pómulo. Aplique ahora una ligera presión sobre la mejilla y tire lentamente de los dedos hacia el borde de la mandíbula inferior. A medida que los dedos se mueven hacia abajo, la boca se abre lentamente. 5 veces seguidas.
-> Mueve la mandíbula inferior hacia la izquierda, la derecha, delante y detrás. También puede hacerlo con movimientos circulares. Este es un buen ejercicio para hacer entre horas.
