Por desgracia, el burnout ya no es una rareza en nuestra sociedad orientada al rendimiento. Una y otra vez nos encontramos en nuestra consulta con pacientes cuyos cuerpos se han rebelado y que ahora pueden recuperar fuerzas con el burnout.
Para que tengamos que ver menos de estos pacientes en el futuro, hemos recopilado algunos consejos sobre cómo puede evitar que se produzca el agotamiento en primer lugar:
-> Si tienes una afición, dedícale tiempo con regularidad.
-> Asegúrese de mantener sus contactos sociales con amigos y familiares.
-> Si tienes problemas (en el trabajo), habla de ellos con gente conocida.
-> Haz algo bueno por tu cuerpo: haz ejercicio o regálate un día de spa.
-> No esperes a que sea demasiado tarde para relajarte, por ejemplo con yoga o entrenamiento autógeno.
Y quizás el consejo más importante: ¡no dejes que el trabajo te domine!