La escalada y el búlder han llegado a las masas. Ambos deportes están muy de moda, y la tendencia aumenta considerablemente.
En los rocódromos está representado todo el mundo, desde los jóvenes hasta los mayores. Lo que cuenta aquí es la diversión de escalar y el movimiento deportivo. Al escalar, los ganchos, eslingas, cuerdas y otros elementos auxiliares son necesarios para la seguridad, pero no deben utilizarse para el movimiento.
La escalada mejora el tono, la fuerza y la condición musculares, así como la coordinación completa del cuerpo, el equilibrio y la orientación espacial.
El búlder es una variante de la escalada. Se escala sin cuerda ni arnés a la altura de un salto. Un búlder clásico suele constar de sólo cuatro a nueve movimientos de escalada, cuyo objetivo es llevar al deportista a sus límites de rendimiento.
Con el búlder aumentas tu concentración, mejoras tu coordinación y la flexibilidad de tu cuerpo.
