"¡Ahora siéntate derecho!" - Probablemente no haya frase que moleste más a los niños que ésta.
Y de adulto piensas: "Ojalá hubiera escuchado a mis padres entonces".
Pero nunca es tarde para hacer algo por una buena postura.
Por eso hoy te damos los 3 mejores ejercicios:
-> Siéntate en el suelo y levanta las piernas flexionadas con las manos en la parte posterior de las rodillas. Mantén la espalda recta (¡no caigas en una espalda hueca!) y lleva los omóplatos hacia los bolsillos del pantalón. Mantén el equilibrio en esta posición.
-> Póngase de pie y lleve los brazos por detrás del cuerpo. Entrelace las manos a la altura de las nalgas con las palmas hacia abajo. Extiéndelas hacia abajo y saca el pecho hacia delante, bajando los hombros.
-> Ponte de pie y levanta los brazos hacia el techo. Las puntas de los dedos apuntan hacia el techo. Ahora tira de los brazos aún más hacia el techo y vuelve a bajarlos tirando de los omóplatos hacia abajo.